Saludo al amigo cuidador de carros ese señor que refleja unos 60 años o mas pero que no tiene según él, me lo dijo sino 42 años; este hombre con un bigote abultado que le permite esconder la falta de dientes, con sus pómulos salidos fruto de la falta de carne en sus huesos de la cara, vestido con su overol que fue de color azul y hoy es un color celeste desteñido por la inclemencia de las lluvias y de los soles sabaneros que pican mas que picadura de avispón toreado. Con su gorra que le ayuda a apaciguar el frío de la noche y de esas mañanas opacas por la neblina que esconde los rayos solares y que presagia un día de esos tristones que no se sabe que nos depare a los bogotanos.
El me dice “buenas mi dotor que se le va a ofrecer hoy? Le lavo el carrito? No hombre solo me demoro unos minutos, mientras recojo a mi mujer que sale de misa.
Asi que me encierro en el carro esperando la salida de misa y para no dejarme helar por ese frío penetrante que no discrimina ni grande ni pequeño.
Por el espejo retrovisor de mi carro veo al hombre discutiendo con un parroquiano de esos con gafas oscuras, con chaqueta de cuero y con botas tipo vaquero del oeste, lo tiene apercollado al pobre hombre que le reclama una monedita por el hecho de haberle cuidado el carro a ese grandullón que se hace acompañar de dos hombres mas grandullones y que de inmediato se llevan la mano a la pistola que esta camuflada dentro de su ostentosa chaqueta. Asi la cosa se ve que están dispuestos a cobrarle a ese hombre el atrevimiento de cobrar unas moneditas por la cuidada del fabuloso mercedes.
Me bajo temeroso y a la vez con bronca de ver esa patoteria que están haciendo con ese humilde hombre e intento socorrerlo tímidamente y dentro de mi propio miedo, por lo menos gritando que no le hagan nada que es un hombre humilde que se tranquilicen. Ellos al ver mi intromisión me encañonaron y tuve que retroceder , fue como prender gasolina y lo encienden a golpes sin dejarlo parar del suelo.
Otras personas que pasaban por este sitio se hicieron los que no veían y así dejaron que esta injusticia se diera a lugar.
Esto sucedió hasta que este hombre se esfumo en los aires como chispas que encendieron los horizontes perdiéndose en la penumbra de ese día brumoso.
Estos hombres quedaron sumidos en el susto de ver como su repentino contrincante se esfumo se torno un ser sobre natural que los dejo apesadumbrados con su corazón herido y el alma destrozada por haber cometido tan aberrante maltrato al débil cuidador de carros.
Yo también quede triste de no haber tenido mas entereza y haber procedido con mas valentía para enfrentar a esos picaros por lo menos con gritos que llamaran auxilio y estos se vieran enfrentados por la sociedad que en la mayoría de los casos actúa con des obligación y con la filosofía del "no metas".
Mi mujer me encontró pálido y con cara de sufrido y me pregunto que te pasa? No tuve coraje en contarle lo ocurrido y solo atine a decirle, mi hija creo que me dormí y soñé una pesadilla de esas que solo se ven en estas tierras donde la violencia corre por todos los lados y no tiene miramientos por ningún parroquiano.
minfanteo
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