Seguir en lo Mismo?

Tomando mi cafecito matinal en el café del barrio aparece mi amigo, de charla libre y sin prejuicios, Alvaro; un tipo de esos con su almanaque desgastado como el mío y con una gran vivencia en el país y testigo de muchas luchas políticas y sociales de nuestra sociedad. Así que partimos con el tema del día que se relaciona con las elecciones y más que nada el futuro político que se avecina para el próximo mes de mayo, o sea ya.
En esta sociedad actual, uno no sabe bien con quien está hablando y más si se trata de política, a uno un lo embarga un poco de recelo ,pues el país está inmerso no solo en la lucha partidista, sino en realidad con los temas que deberían ser prioridad como parte sustantiva de los partidos políticos, sus líderes y los electores como es el matiz del narcotráfico y la corrupción; sin dejar de lado los problemas que aqueja a la gran mayoría como es la pobreza y su complemento el desempleo. Ante estos grandes y angustiantes temas la sociedad está muy dividida y en algunos casos, más o menos frecuentes, da uno con una persona que no admite, por nada del mundo que el otro tenga una opinión diferente a la que el detecta.
Afortunadamente Alvaro, mi amigo de café, es un hombre con buen pasado en su vida como ciudadano de bien y con una mentalidad abierta que permite el disenso del otro en forma respetuosa; así que salen los temas en especial el de que pasara en el cortísimo plazo de días sobre cómo se arreglaran las cargas del poder para enfrentarse los lideres de turno ante la consulta para la presidencia en la primero vuelta. Afortunadamente si hay alternativas, claro de todo como en botica, están los que podríamos llamar más cerca a la derecha, los que están más cerca a la izquierda y los que podríamos llamar de centro. Dice mi amigo te recuerdas de hace muchos años por el 1950 1955 como eran las elecciones en Colombia? Bueno yo le digo yo era muy pequeño pero algo recuerdo que salir en día de elecciones era un gran peligro y a los chiquitos no nos llevaban a esos eventos.
El amigo Alvaro dice bueno eran años de mucha violencia y en realidad eran solo dos los llamados partidos que luchaban, como fuera para hacerse al poder y ser de un partido era considerado por los otros como un enemigo y viceversa. Los colores rojo y azul eran los colores que marcaban la identificación de un partido y otro, por un color murió mucha gente y se cometieron muchas infamias que dejaron en el pueblo un sentido de miedo a la política. Los Jóvenes de esa época como nosotros nos volvimos descreídos de la política.. Eso dice Alvaro marco’ un paradigma de que la política no era algo bueno para la sociedad, lo cual trajo el que los “politiqueros y la corrupción” irrumpieran como adalides de la “democracia”. Afortunadamente se han superado muchas de estos estigmas pero hoy estamos ante otros monstruos que amenazan a las personas y en general a la sociedad como es el narcotráfico, el terrorismo ,la búsqueda de la plata fácil y la corrupción; lo peor es que seguimos con índices grandes de bajo desarrollo de nuestro pueblo.
Han pasado muchos años, mas de 50 años y durante estos si bien se han logrado avances en materia de crecimiento de la economía y algunas mejoras sociales aun reducidas, (como es el avance en la educación ,la vivienda y en la salud) si se compara con lo que se necesita y con lo que han logrado pueblos de otros países , con menos disponibilidad de recursos y extensión como los que dispone Colombia; claro que hay mas carros, mas información y comunicaciones, mas inventos y servicios para la gente con ingresos importantes que hace con que la inequidad y la separación de grupos sociales se mantenga e incluso en los últimos años se amplíe entre pobres y ricos.
Estando en esta charla aparece Dona Graciela con “cara de riel” y le dice a Don Alvaro, bueno hombre como va la compra del encargo que te hice? Ya la compro? y éste se acuerda que vino a comprar algo ,ese era el mandado que iba a hacer y con la charla “se le fue la onda”. Se paró a la carrera para evitar más confusión con la Doña; dijo bueno la seguiremos mañana. Ahí quedé mudo charlando con los recuerdos, son tantas cosas que han pasado que no se pueden olvidar, sino por el contrario capitalizar la amarga experiencia y lo bueno que también existe. La seguimos mañana con un muevo capuchino.
minfanteo